Tras el inicio de la reunión, la Cancillería local emitió un comunicado de condena enérgica a “los actos de violencia ocurridos hoy en el Ecuador, que vulneran los derechos fundamentales de los ecuatorianos y atentan contra la seguridad de ese hermano país”.
El texto respalda al gobierno de Daniel Noboa y a la institucionalidad y estabilidad del vecino país y desea “un pronto restablecimiento de la paz y seguridad en dicho país”.
Por su parte, el presidente del Congreso, Alejandro Soto, llamó al Gobierno peruano a que “tome medidas urgentes en la frontera para evitar hechos similares”
En la reunión gubernamental realizada en el Palacio de Gobierno participan la presidenta, el primer ministro, Alberto Otárola, y los titulares de Relaciones Exteriores, Javier González Olaechea; Defensa, Jorge Chávez; Interior, Víctor Torres, y Justicia, Eduardo Arana, convocada para tratar el tema.
De otro lado, el exministro del Interior Rubén Vargas pidió al Gobierno que declare Estado de Emergencia en las regiones costera, andina y amazónica fronterizas con Ecuador, que se caracterizan por su extensión y porosidad para el paso informal de un lado a otro del lindero.
La medida, dijo, debe aplicarse para impedir la penetración en territorio peruano de organizaciones criminales ecuatorianas, entre las que al menos dos operan ya en regiones costeras como la norteña de La Libertad.
Vargas sostuvo que los ministros de Defensa e Interior deben trasladarse a la zona fronteriza para disponer las medidas a tomarse ante la situación y considerço “absolutamente posible” que en Perú se genere una situación de desborde delincuencial como el que sufre Ecuador.
Informes de la televisión de Tumbes, región costera limítrofe de Ecuador, indican que fuentes policiales informaron que se ha reforzado el control migratorio ante la posibilidad de que intenten cruzar a Perú criminales del vecino país.
rgh/mrs