«He estado al 100 por ciento desde el primer kilómetro. Ha sido duro, pero he conseguido marcar un buen ritmo y he hecho una gran etapa. No me esperaba este tipo de arena blanda porque había oído que había llovido los últimos días, pero aun así he disfrutado», declaró al final de la carrera.
El sudamericano espera que este éxito le venga bien antes de cumplir con la próxima etapa de 48 horas por el imponente Empty Quarter, el desierto más grande de Arabia Saudita.
Tendrá que recorrer 626 kilómetros en dos días y todos los competidores dormirán en campamentos improvisados con una mínima ración de comida, sin recibir asistencia técnica sus equipos y sin tener información de cómo marcha la carrera.
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