Un escenario de condena a Trump podría cambiar dramáticamente las cosas, sugirió una nueva encuesta, en la cual el 53 por ciento de los electores en estados indecisos clave se negarían a votar por el exmandatario de ser declarado culpable de un delito penal.
El sondeo de Bloomberg y Morning Consult, citado este jueves en medios locales, encontró también que una proporción ligeramente mayor, el 55 por ciento, dice que llegaría a esa conclusión si fuera sentenciado a prisión.
Consideró el análisis que, si esas cifras son precisas, podrían fácilmente decidir las elecciones, dado lo reñidas que han sido las peleas de Trump tanto en 2016 y 2020.
Una condena “es absolutamente un posible factor decisivo” en una elección en la que Trump o el presidente Joe Biden “podrían ganar o perder por una gran variedad de razones”, dijo el estratega republicano Doug Heye, exdirector de comunicaciones del Comité Nacional Republicano, citado por el diario The Hill.
El estudio se realizó en siete estados que probablemente determinarán el resultado de las elecciones: Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin.
Curiosamente, la encuesta sugirió que el 20 por ciento de los votantes de aquellos estados que habían votado por Trump en 2020 estarían “algo poco dispuestos” o “muy poco dispuestos” a votar por él nuevamente si fuera declarado culpable.
«La preponderancia de las encuestas muestra que hay una porción de votantes republicanos que dicen que una condena por un delito grave sería un puente demasiado lejos», subrayó el estratega republicano Dan Judy, también citado por el periódico.
Hace poco Joe Tacopina, uno de los abogados litigantes del exmandatario en Nueva York, ofreció una predicción nada favorable para las batallas legales en curso de su excliente.
Según advirtió, es “absolutamente posible” que Trump sea condenado en uno de sus casos penales federales.
Sin embargo, ante la falta de condena, el tanteo de Bloomberg sitúa a Trump seis puntos arriba entre los votantes registrados en los estados en disputa.
El pasado año se presentaron cuatro acusaciones contra Trump, por un total de 91 cargos penales, pero en lugar de perjudicarlo, esos acontecimientos parecieron reforzar su control sobre la nominación republicana.
Hasta el momento el expresidente ganó los caucus del partido en Iowa y las primarias en New Hampshire.
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