Al presentar ante la Asamblea General del organismo sus prioridades para 2024, el alto representante consideró ese principio como la salida a las actuales crisis interrelacionadas.
“La paz es nuestra razón de ser. Sin embargo, al analizar el panorama del mundo actual, lo que más falta dramáticamente es la paz”, afirmó el titular de Naciones Unidas.
A juicio de Guterres, los conflictos se extienden desde Gaza y África hasta la guerra contra el medio ambiente, la desinformación tóxica y el discurso de odio donde los civiles son los más afectados.
“Para millones de personas atrapadas en guerras en todo el mundo, la vida es un infierno mortal, cotidiano y hambriento”, afirmó.
El máximo responsable de la ONU calificó la crisis en Gaza como una “herida supurante en nuestra conciencia colectiva” al insistir en sus reclamos para un alto al fuego humanitario inmediato y la liberación de los rehenes.
Al mismo tiempo, el alto representante advirtió de los peligros de esta “era de caos” al reclamar el cumplimiento de las obligaciones de la Carta de las Naciones Unidas y, en consecuencia, el derecho de todas las personas a una vida en paz y dignidad.
“Sin embargo, los gobiernos están ignorando y socavando los principios mismos del multilateralismo sin responsabilidad alguna”, afirmó.
Guterres remarcó además su llamado a una reforma del Consejo de Seguridad, un órgano que consideró estancado.
«Estamos viendo los resultados: una batalla peligrosa e impredecible con total impunidad», dijo además sobre los riesgos que van desde el uso de armamento nuclear más furtivo hasta nuevos dominios de conflicto y armas.
Para enfrentarla, el secretario general llamó a fortalecer y renovar los marcos globales de paz y seguridad, así como a enfilar los esfuerzos para cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), metas cruciales para la prosperidad.
En ese sentido, pidió avances en dos áreas cruciales: el estímulo de los ODS de 500 mil millones de dólares anuales en financiamiento asequible a largo plazo para los países en desarrollo y la reforma de la arquitectura financiera internacional para responder a las necesidades de todos los países.
rgh/ebr
