Los discipulos de José Mayorga, elegido director del equipo Todos Estrellas del torneo, se apoyaron en una ofensiva de 10 imparables y en los lanzadores relevistas, para darle a la franquicia su primer podio y el sexto a su país en la historia de esas citas regionales.
Un trío de anotaciones de sus rivales en el tercer acto para romper un abrazo a una carrera y dinamitarle el montículo al abridor Heitor Tokar, no amilanó a los canaleros.
Luego de tres sencillos, uno de ellos impulsador de Roger Bernardina, y un bambinazo con uno a bordo de Jonathan Schoop, los rescatistas durmieron los maderos isleños para que su tropa firmara la remontada.
Dos rayitas en el cuarto capítulo, remolcadas por una rolata al cuadro de Ricardo Céspedes y por un cohete de Joshwan Wright, sirvieron para acortar el marcador y expulsar al abridor Scott Prins.
La igualada llegó al cierre del segundo tercio de juego, cuando el mismo Wright conectó un elevado de sacrificio con los sacos repletos, ante un envío del derrotado Codey Mincey.
Un vuelacercas solitario del enmascarado Iván Herrera -su tercero en la justa- en la llamada entrada de la suerte propició la ventaja que ya no perdieron más por el resto del pleito.
Samuel Burgos se anotó el éxito con una impecable labor monticular de 4.2 episodios, donde mantuvo bien cerradas las puertas del plato, dispersó tres indiscutibles y abanicó a dos contrarios.
Del resto se encargaron Ronald Ramírez, al sacar par de outs en el octavo con dos corredores en circulación, y Severino González, quien retiró el noveno para ponerle el cerrojo al pleito.
En el horario nocturno se batirán por el trofeo de campeón los venezolanos Tiburones de La Guaira y los quisqueyanos Tigres del Licey (actuales monarcas), todo un clásico de la llamada «Pequeña Serie Mundial Latinoamericana».
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