En ese reclusorio permanecen seis mil 50 presos, de los cuales 500 están relacionados a la organización criminal Los Choneros, hoy considerada terrorista.
Un reporte del canal Ecuavisa detalló que, tras la intervención de la fuerza pública, las celdas de la cárcel se mantienen sin electricidad. Mientras los uniformados siguen hallando artículos prohibidos armas, drogas, celulares, municiones y explosivos escondidos entre las paredes y el piso.
De igual manera, alrededor de las instalaciones hay seis tanquetas y un campamento militar permanente instalado en una hectárea y media.
Entretanto, el Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de Libertad (SNAI) continúa con el censo de los presos, quienes han sido reubicados en los 10 pabellones habilitados.
Este viernes, el director del área de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, Freddy Goyes, informó que durante el feriado de carnaval, que se extenderá hasta el martes 13 de febrero, no se detendrán las requisas en las cárceles del país.
Añadió que tampoco cesarán las acciones contra «objetivos de mediano y alto valor», en referencia a miembros de organizaciones vinculadas al crimen organizado.
Ecuador atraviesa por un conflicto armado interno, declarado por el mandatario Noboa el pasado 9 de enero ante una ola de atentados y acciones violentas atribuidas al crimen organizado.
Las mismas incluyeron el secuestro de policías, explosiones, vehículos incendiados, motines simultáneos en cárceles con unos 200 rehenes que lograron ser liberados y la toma de un canal de televisión por 13 encapuchados armados, ahora detenidos.
Desde ese momento, más de seis mil 341 personas han sido detenidas, entre ellas más de 200 por presunto terrorismo.
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