Marcelo Montenegro, ministro de Economía y Finanzas Públicas de Bolivia, recibió este viernes el entendimiento rubricado en La Paz durante un acto especial en presencia de autoridades gubernamentales y diplomáticas de las dos naciones.
“Estamos dando aquí la certeza a toda la población de que el Banco Unión ha abierto una corresponsalía con el ICBC, el banco más grande del mundo”, afirmó el titular.
Aseguró el ministro que, con la primera corresponsalía se consolidan las relaciones comerciales y económicas entre ambos países y se abre un nuevo escenario de perspectivas para generar un mayor volumen de negocios con el yuan.
Indicó que corresponderá a la parte gerencial del Banco Unión abrir la cuenta del país andino-amazónico para que ya la gente pueda operar directamente bolivianos con yuanes.
De esta forma, enfatizó, “vamos rompiendo algunos esquemas donde estamos atados a algunas otras divisas”.
Elogió Montenegro que ahora Bolivia se diversifica con el renminbi o yuan, la divisa de curso legal de China, emitida por el Banco Popular de la nación asiática, ubicada entre las cinco monedas más importantes del mundo.
“En buena hora para la economía boliviana -opinó-, tener esta excelente alternativa para el comercio y de seguro que lo van a poder hacer directamente en el banco de los bolivianos, que es el Banco Unión”.
Felicitó el ministro, asimismo, las gestiones realizadas para alcanzar esta primera corresponsalía, y señaló que se trata de un acto que refleja el lazo importante que tiene Bolivia con China, “un país amigo, un socio importante”.
Acotó que China es, en términos de producción, la economía más grande del mundo en este momento.
Subrayó que, gracias a los lazos de amistad entre los presidentes Luis Arce y Xi Jinping, de Bolivia y China, respectivamente, se hace posible esta apertura de relaciones económicas y comerciales muy importantes.
En mayo de 2023, el presidente Arce expresó en un discurso la posibilidad de pagar las importaciones de China en yuanes, medida que puede contribuir a frenar la caída de las reservas nacionales, un camino que ya transitan Argentina y Brasil.
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