Un comunicado de la Cancillería al que tuvo acceso Prensa Latina advierte que en una entrevista televisiva el mandatario manifestó “(…) que los dueños reales de la droga (…) los grandes, los peces gordos, estarán en Colombia, en Paraguay, en Bolivia”.
Confirma el texto que, ante esta situación, en fecha 7 de marzo de 2024 la ministra, Celinda Sosa, convocó al embajador de Uruguay, Fernando Daniel Alejandro Marr Merello.
Añade que el objetivo de esa convocatoria fue solicitar la aclaración del Gobierno uruguayo, “en el marco de las relaciones bilaterales de respeto a la soberanía, la no injerencia, en los asuntos internos y de buena vecindad que caracterizan a nuestros países (…)”.
Concluye el comunicado con un llamado a unirse a la propuesta de Bolivia de regionalizar la lucha contra el narcotráfico.
El dignatario uruguayo insistió en la entrevista en que «el tema del financiamiento y los dueños reales de la droga, a mí no me cabe la menor duda que no son uruguayos y que están en otro lugar del mundo. Los grandes, los peces gordos, estarán en Colombia, en Paraguay y en Bolivia, en Europa».
Agregó el jefe de Estado en defensa de su período de mandato que «cuando tú veas las cifras de móviles incautados, de dinero incautado, droga incautada, de indagados y procesados, no hay comparación en la historia de nuestro país».
Sin embargo, Lacalle Pou omitió mencionar la nacionalidad del narcotraficante Sebastián Marset, en la actualidad el capo de las drogas más buscado en Sudamérica.
De origen uruguayo, Marset estableció ilegalmente una organización criminal en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, por varios años, y en 2023, tras ser descubierto, huyó del país y desde entonces permanece prófugo en paradero desconocido bajo mandato de búsqueda y captura.
En reiteradas ocasiones, el Gobierno del presidente Luis Arce insistió en que Bolivia no es país productor de drogas, sino un territorio de tránsito obligatorio en la ruta de las sustancias controladas de Latinoamérica y el Caribe.
Igualmente, insiste en todos los foros internacionales en regionalizar la guerra contra este flagelo y promueve la creación de la Alianza intergubernamental Latinoamericana Antinarcóticos.
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