Tras una conversación de cerca de tres horas, Tshisekedi aceptó en principio reunirse con Kagame, si bien exigió la retirada de las tropas de las Fuerzas Armadas de Ruanda del territorio de la RDC, el cese de las hostilidades y el acantonamiento de los rebeldes del Movimiento 23 de Marzo (M23).
Luego de ese encuentro correspondía al equipo de mediación trabajar en las demás etapas para hacer realidad el diálogo entre los presidentes de Ruanda y la RDC, actualmente en conflicto debido al respaldo del primero a grupos armados que operan en territorio del segundo.
La conversación de este lunes con Lourenço podría ser determinante para el esperado intercambio entre ambos mandatarios.
El pasado mes de febrero, al margen de la 37 Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la UA, el presidente angoleño se entrevistó por separado con sus homólogos de la RDC y de Ruanda para tratar de hacer avanzar el proceso de pacificación, actualmente en riesgo por el agravamiento de los enfrentamientos.
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