De acuerdo con esa fuente especializada, en los dos primeros meses del año los factores positivos que impulsan la recuperación económica del gigante asiático se fortalecieron, aunque el entorno sigue siendo complejo y grave.
El portavoz de esa institución, Liu Aihua, aseguró que la mayoría de los indicadores mantienen un sólido impulso, «lo que ha sentado una buena base para el crecimiento de todo el año».
Mencionó algunas cuestiones positivas que inciden en este comportamiento, entre ellas un flujo más dinámico de factores económicos como personas y bienes, una mayor vitalidad del mercado y un rápido crecimiento de nuevos tipos de consumo.
El vocero expresó su confianza en el cumplimiento de la meta del PIB de cinco por ciento que se planteó el gigante asiático para 2024.
En este sentido, opinó que las políticas de apoyo del gobierno deben desempeñar un papel más importante en la recuperación económica, pero advirtió sobre las inestabilidades e incertidumbres externas.
El ministro chino de Comercio, Wang Wentao, subrayó recientemente que el gobierno potenciará nuevos enfoques para el consumo interno, que contribuyó en 82,5 por ciento al crecimiento económico nacional en 2023.
De hecho, el titular explicó que el país priorizará un consumo de bienes enfocado en el reemplazo de los viejo por lo nuevo.
«La promoción de la sustitución de bienes por otros nuevos no es sólo una fuerza motriz para aumentar el crecimiento económico actual, es una medida poderosa para consolidar la recuperación, también una estrategia a largo plazo para promover un desarrollo de alta calidad», enfatizó.
Weng explicó que el otro enfoque está dirigido a la expansión del consumo de servicios, lo cual guarda relación con la mejora del nivel de vida de la población.
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