De acuerdo con un comunicado divulgado este miércoles por la oficina de prensa de la Santa Sede, en su misiva dirigida a los participantes en ese evento, que tiene como tema Pascua con nuestros hermanos migrantes, el Sumo Pontífice expresó su preocupación por la caravana humana que pasa por el Tapón del Darién, en “un verdadero viacrucis”.
“En el Darién, con los hermanos y las hermanas migrantes”, encabezó Francisco sus palabras, y añade que “es ahí que ellos nos esperan, en la orilla terrestre de un mar de lágrimas y muerte que une hombres y mujeres, adultos y niños de las más diferentes latitudes”.
El Obispo de Roma aseveró que “la migración en esa región incluye venezolanos, ecuatorianos, colombianos, haitianos, que a lo largo del camino se vinculan con grupos de nicaragüenses y otros caminantes centroamericanos, así como de otros continentes”.
“Con su faceta multicultural, esta caravana humana pasa por el Tapón del Darién, una selva que es triunfo de la naturaleza pero que hoy se convierte en un verdadero viacrucis”, que muestra límites de gobernanza migratoria en el hemisferio occidental, y “alimenta un próspero negocio que permite acumular ganancias ilícitas del tráfico humano”.
El Papa pidió que la fraternidad hospitalaria de quien acoge con sensibilidad humana, se imponga a la indiferencia que ensangrienta el Darién.
Se refirió a su mensaje por la Jornada Mundial de Migrantes y Refugiados de 2023, donde expresó que “el derecho a no migrar se nos presenta como solución, aunque sea a largo plazo, a la migración forzada, por medio de la integración regional de los países expulsores, de tránsito, destino y retorno de migrantes”.
En tal sentido exhortó a “sumar esfuerzos con todas las instancias de la comunidad internacional, para que todos tengan ese derecho a permanecer en su tierra con una vida digna y pacífica”, y puedan “ofrecer su contribución, a través del trabajo y el compromiso personal” por “el bien de todos y la protección de nuestra casa común”.
Por otra parte, tras la audiencia general de este miércoles, el Pontífice retomó el tema de los actuales conflictos en muchas partes del mundo y reafirmó que “la guerra es un horror”, por lo que renovó su llamado a “hacer todos los esfuerzos posibles para negociar su fin”.
“La guerra es siempre una derrota”,dijo una vez más Francisco, y enfatizó que “no podemos seguir adelante” con la misma, por lo que instó “a encontrar soluciones para poner fin a los conflictos”.
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