La competición empezó muy peleada en la lid de los hombres, pero la embarcación ganadora tomó la delantera en los primeros minutos, aunque solo con una ventaja de menos de un segundo en la primera milla.
Al paso por Chiswick Steps, la carrera ya estaba casi resuelta, los remeros de Cambridge aumentaron su ventaja y afrontó los últimos compases con más de 10 segundos de diferencia.
Oxford lo intentó hasta el final, al ver los problemas en la embarcación rival con un remero totalmente exhausto. Sin embargo, la diferencia era lo suficientemente amplia para sellar el triunfo.
En la competición femenina, Cambridge dominó la prueba, pero con mucha más igualdad que en los años anteriores.
Además, ambas embarcaciones estuvieron cerca de chocarse y las remeras de Oxford debieron cambiar su trayectoria y esa acción las llevo a perder mucho tiempo.
Al final, las campeonas cruzaron la meta con una ventaja de 21 segundos para vencer por séptima edición consecutiva.
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