Spielberg manifestó el honor que sintió al dialogar con el realizador de la película, Denis Villeneuve, y señaló la importancia de ser un “constructor de mundos” en el cine.
El director de Tiburón (1975), Encuentros Cercanos del Tercer Tipo (1977), Parque Jurásico y La lista de Schindler (1993) o Los Fabelman (2022) expresó durante el último episodio del podcast Director’s Cut de la DGA su admiración por Dune: Parte Dos en una conversación con Villeneuve.
No escatimó en ponderar a su colega y su trabajo, indicando que realizó una de las películas de ciencia ficción más brillantes hasta ahora.
En su lista importantes creadores incluyó a pioneros y visionarios del calibre de Georges Méliès, Walt Disney, Stanley Kubrick, George Lucas, Ray Harryhausen, Federico Fellini, Tim Burton.
Llamado el Rey Midas del cine, Spielberg encomió también a cineastas como Wes Anderson, James Cameron, Christopher Nolan, Ridley Scott y Guillermo del Toro.
En su entrevista con el director de Dune: Parte Dos afirmó que se trata de uno de los miembros más nuevos de ese selecto grupo, destacando su capacidad para crear universos complejos y detallados en sus obras.
Uno de los aspectos más celebrados por Spielberg de Dune: Parte Dos fue la representación del desierto y su relación con el agua, un elemento central en la trama de la película.
Describió cómo Villeneuve logró transformar ese lugar seco en un espacio que evoca un océano o un mar, con los gusanos de arena desempeñando un papel similar al de las serpientes marinas.
Spielberg destacó, además, la habilidad de Villeneuve para hacer que el desierto no solo sirviera como escenario, sino como un personaje dinámico y fundamental en la narrativa de la película.
El rodaje de la secuencia en la que uno de los personajes monta un gusano de arena llevó 44 días de trabajo, durante los cuales se construyó una pieza de set de 90 pies de largo por 24 pies de ancho para dar vida al gusano de arena.
Greig Fraser, el director de fotografía de Dune: Parte Dos admitió las dificultades que enfrentaron para adaptar esa visión del libro a la pantalla, enfocándose en la importancia de mantener la credibilidad de la audiencia ante tal espectáculo.
La recepción de Dune: Parte Dos, tanto por parte de la crítica, como del público es hasta hoy brumadoramente positiva, superando los 570 millones de dólares a nivel mundial.
Su éxito se sostiene en la habilidad de Villeneuve para capturar la esencia de la obra de Frank Herbert, al trasladar con éxito el complejo mundo de Dune al cine y, al mismo tiempo, mantener una narrativa atrapante y visualmente impresionante que cautivó a audiencias en todo el mundo.
El reconocimiento de Spielberg hacia Villeneuve no solo valida el arduo trabajo y la visión del director canadiense, sino también destaca la continuidad y evolución del género de ciencia ficción en el cine, el cual continúa como un espacio para la innovación, la aventura y la exploración de las profundidades de la imaginación humana.
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