“La tasa de crecimiento anual en el número de adultos con Índice de Masa Corporal alto es del 3,5 por ciento de 2020 a 2035, mientras que el alza en los menores será del 3,1”, señaló el texto, citado por un medio de prensa local.
En el caso de los infantes, dentro de 11 años más de 276 mil 566 tendrán problemas de hipertensión, 109 mil 340 hiperglucemia y 308 mil 894 problemas de colesterol, advirtió el análisis de la Federación Mundial contra la Obesidad.
El gerente médico del área de diabetes, obesidad, osteoporosis y urología de la compañía farmacéutica líder en la región Asofarma, Alejandro Salvatierra, calificó de preocupante ese padecimiento en este país debido a su aumento.
Junto al sobrepeso, en realidad son detonadores de enfermedades que, en el caso de la población joven, se verán en unos años y con mayor gravedad si no nos preparamos, acotó el experto, citado por el diario Prensa Libre.
Dentro de los factores medioambientales que los promueven de forma indirecta, aparte de las emisiones de gases de efecto invernadero, residuos plásticos y práctica insuficiente de ejercicio, aparece la subida de la población en zonas metropolitanas y de la urbanización anual, remarcó.
A juicio de la nutricionista de la Liga contra la Obesidad y el Sobrepeso en esta nación, Carla Franco, el posible factor que lleva a que la ciudad capital exhiba los mayores casos es por su gran movimiento laboral.
Ese ambiente puede propiciar elevados niveles de estrés y ansiedad, el acceso rápido a la comida procesada y la poca movilidad dentro del área urbana suelen afectar de manera negativa la condición de salud de una persona, explicó.
Salvatierra agregó, por su parte, que conllevan a padecer obesidad el incremento de trabajos sedentarios, el fácil acceso a alimentos no naturales, la falta de movilidad física por la estructura de la zona y el tráfico vehicular.
“Hace algunos años la población urbana de Guatemala era cerca del 39 por ciento y ahora estamos con más del 50”, dijo.
El mayor problema alimenticio de este territorio centroamericano ya no es la desnutrición en niños, aunque sigue siendo algo bastante grave, sino la obesidad en adultos, sobre todo en mujeres, consideró el doctor.
Las consecuencias desafortunadas no las veremos ahora, pero sí en 10 y 15 años, enfatizó Salvatierra.
De acuerdo con datos de un estudio publicado en la revista británica The Lancet, más de mil millones de personas presentaban gordura en 2022.
Durante ese período anual los índices combinados de desnutrición y obesidad más elevados se registraron en países insulares del Pacífico y el Caribe, así como en aquellos de Oriente Medio y África septentrional.
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