Un reciente reporte de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) divulgado aquí considera preocupante el impacto adverso de condiciones climáticas extremas, como la sequía prolongada y otros peligros naturales como inundaciones y terremotos.
Los impactos del cambio climático afectan la situación humanitaria en el país, adviritó Alexander Jones, director de la División de Movilización de Recursos de la FAO.
Tras una reciente visita el país, Jones insistió en la necesidad de mantener el apoyo del organismo para la actividad de cultivo mientras las consecuencias de la crisis climática exacerban la vulnerabilidad de la población en la nación controlada por los talibanes.
La sequía, la escasez de agua y el rápido descenso de los niveles freáticos afectan con mayor dureza a los agricultores y pastores, agregó el experto.
Para revertir ese efecto, la FAO apoya a comunidades mediante programas de dinero por trabajo en la construcción de infraestructuras de gestión del agua, incluidos muros de contención y más de seis mil represas para reducir el impacto de las inundaciones.
Estas inversiones permiten reponer los niveles de agua subterránea y facilitar el riego, mejorando así el rendimiento de los cultivos y proporcionando a las familias fuentes fiables de alimentos.
La ONU estima las necesidad humanitarias para este año en el país en tres mil 60 millones de dólares.
Su respuesta humanitaria tiene objetivo llegar a 17,3 millones de afganos de los 23,7 millones de personas que necesitan asistencia vital, más de la mitad de la población del país.
A inicios de año, la oficina de Naciones unidas en Kabul, aseguró que el país continúa tambaleándose debido a décadas de guerra, y lidiando con crisis inducidas por el clima, desastres naturales recurrentes, pobreza arraigada y barreras a la participación de las mujeres en la vida pública.
Las prioridades clave del organismo incluyen ayuda alimentaria, agua potable, atención médica, educación así como abordar las necesidades agudas de agua, saneamiento e higiene.
A la par, prevé la protección de los grupos vulnerables, especialmente las mujeres, los niños y las personas con discapacidad.
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