De autoría del presidente de esa asamblea, Rodrigo Pacheco, la PEC fue aprobada el 13 de marzo por amplia mayoría en la Comisión de Constitución y Justicia del consejo legislativo.
Tal discusión en el Parlamento es una respuesta al juicio del Supremo Tribunal Federal (STF) sobre la despenalización del porte de marihuana para uso personal.
Antes de ser sometida a votación en primera vuelta, la propuesta fue discutida en cinco sesiones plenarias del Senado.
Tras la primera votación, el texto se debatirá en dos sesiones más. Para que una PEC sea aprobada, es necesario el apoyo de al menos dos tercios de los senadores (54 votos), después de dos turnos de deliberación. Todavía no se ha fijado la fecha de la votación en segunda vuelta.
La PEC añade al artículo cinco de la Constitución el texto: «la ley considerará delito la posesión y el porte, independientemente de la cantidad, de estupefacientes y drogas afines sin autorización».
Según el senador Efraim Filho, ponente de la materia, la mayoría de las personas cree que los tóxicos ilegales deben ser criminalizados. Considera que la legalización de las drogas puede conducir a un acrecentamiento en el consumo.
«Incluso los defensores de la liberación saben que las drogas conduce a un aumento del consumo y el aumento del consumo conduce a la explosión de la dependencia química. Solo una familia que tiene un dependiente en su seno sabe lo nocivo que es convivir con esa realidad”, señaló Filho al presentar el informe.
Razonó en que existen testigos de casos de crecida de la violencia doméstica, de hurto y crimen dentro de la propia familia para que se pueda financiar la compra de la droga.
«Entonces, la familia brasileña no quiere y no está preparada para esa liberación y despenalización de las drogas», recalcó el senador e insistió en que «despenalizar es fortalecer el tráfico que financia el crimen organizado, el responsable de las barbaries de la sociedad moderna, el cual lleva a la escalada de la violencia».
En el escrito, Filho propuso que los usuarios sean castigados con penas alternativas a la prisión, como advertencia, prestación de servicios comunitarios o participación en programas educativos.
Si se aprueba, el texto de la PEC se enviará a la Cámara de Diputados.
El porte de drogas para consumo propio también está siendo analizado por el STF. Sin embargo, una solicitud de vista en el último día 6 hizo que el juicio fuera suspendido. Hasta ahora, cinco votos consideran inconstitucional criminalizar el porte de marihuana para uso personal.
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