Fallecida en La Habana a los 85 años de edad, Ramona de Sáa se sitúa entre las leyendas de la compañía a lo largo de la historia, como Josefina Méndez, Loipa Araújo, Aurora Bosch y Mirta Plá, junto a Alicia y Fernando Alonso.
“Que su legado viva para siempre. Muchas gracias.”, declaró Valdés, actual directora general y primera bailarina del BNC al inicio de la función en esta ciudad andaluza.
Al hablar ante el público en la sala “García Lorca”, del Palacio de Exposiciones y Congresos de Granada, se refirió al deceso de Ramona de Sáa, “una de las más importantes profesoras de ballet de Cuba y de Iberoamérica. Ella fue maestra de todos los bailarines que hoy integramos el Ballet Nacional de Cuba”.
A su rigor, a sus enseñanzas, debemos gran parte de lo que somos, acotó.
El espectáculo del BNC repitió “Don Quijote”, en versión coreográfica de Marta García y María Elena Llorente, sobre la original de Marius Petipa y la versión de Alexander Gorsky, y dirección artístico-coreográfica de Alicia Alonso.
Parte de su gira por España y Portugal, en esta ocasión la obra estuvo protagonizada por Grettel Morejón (Kitri), Yankiel Vázquez (Basilio), Ányelo Montero (Espada), Chavela Riera (Mercedes) así como Carolina Rodríguez y Camila Alfonso, quienes debutaron en los papeles de la Reina de las Dríadas y el Amor, respectivamente.
Anteriormente, Viengsay Valdés, en una declaración pública, habló de Ramona de Sáa, “nuestra querida maestra Cheri, como cariñosamente la llamábamos sus alumnos (…), la inteligencia, la abnegación y el talento que siempre la distinguieron”.
En otra parte de sus reflexiones, señaló que “su cabal comprensión de las ideas de Alicia y Fernando Alonso, y su innata capacidad para llevarlas a la práctica contribuyeron a su excepcionalidad”.
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