Según la prensa palestina, aviones de combate atacaron al menos tres viviendas en la sureña ciudad de Rafah, que causaron 22 fallecidos, incluidos mujeres y menores de edad.
En los últimos días, el Ejército israelí aumentó sus incursiones contra esa localidad, donde se refugian más de 1,1 millones de personas en apenas unas docenas de kilómetros cuadrados.
El Gobierno de Benjamin Netanyahu amenazó en repetidas ocasiones con lanzar un asalto terrestre contra Rafah, pese al rechazo mundial por las consecuencias que tendría en la población civil.
En las últimas horas las fuerzas israelíes también dispararon contra una casa en la zona de Abu Hasira, ubicada en la norteña urbe de Gaza, donde también se informaron victimas mortales.
Además, los campamentos de refugiados de Nuseirat y Bureij fueron blanco de las incursiones áreas.
Según datos oficiales, más de 34 mil ciudadanos murieron y 77 mil resultaron heridos desde el comienzo del nuevo ciclo de violencia, el 7 de octubre del pasado año.
Este lunes se espera la llegada a El Cairo, Egipto, de delegaciones de Hamas e Israel para mantener conversaciones indirectas para un alto el fuego y el intercambio de prisioneros.
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