En su opinión, el cerco económico, comercial y financiero intenta impedir los lazos de solidaridad con la isla.
Durante su intervención en el Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y contra el imperialismo, que tiene lugar en el Palacio de las Convenciones, Adler consideró que la política estadounidense demuestra la urgencia de transformar el orden mundial vigente.
En ese sentido, se refirió a los debates del II Congreso Internacional sobre los desequilibrios del mundo, las urgencias de paz y desarrollo y la necesidad de un Nuevo Orden Económico Internacional, que sesionó recientemente en la capital.
Subrayó que los participantes, provenientes de 36 países, manifestaron su solidaridad profunda y compromiso con unirse a «esta lucha que nos ocupa aquí y es el bloqueo injusto» contra la nación caribeña.
Significó que el foro fue un llamado a todas las fuerzas democráticas, justas y progresistas del mundo a unirse a la lucha por un nuevo orden económico internacional que corresponde a la necesidad de proteger las posibilidades de un desarrollo soberano y una paz total.
El coordinador general consideró a Cuba como un espacio esencial para propiciar el debate por el rol fundamental que jugó en la formación del original nuevo orden económico internacional y es un espacio de debate «que convoca a todo el mundo a venir aquí para hablar».
Para el joven activista de la solidaridad, la motivación de asistir a la cita de este jueves es la convicción de que hoy en día el mundo enfrenta un verdadero riesgo de una guerra internacional.
Este encuentro apuntó, es una oportunidad para reflejar y comunicar a los más de mil activistas los resultados del congreso sobre el nuevo orden internacional.
Asimismo, indicó que permite convocar a los presentes a participar en el desarrollo de un plan de acción que será anunciado y publicado ante la Asamblea General de Naciones Unidas en septiembre de este año.
«Desde mayo a septiembre, vamos a estar elaborando, en conjunto con todos los gobiernos que participaron en el congreso y muchos más, un plan de acción para ganar la paz, para ganar el desarrollo soberano que vamos a hacer llegar a cada oreja del mundo», detalló.
El Encuentro de Solidaridad celebra este jueves su última jornada con la presencia del presidente Miguel Díaz-Canel y de mil 144 líderes sindicales de 58 países, de 220 organizaciones, entre ellos representantes de centrales sindicales, movimientos de solidaridad y partidos políticos.
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