La UE por ahora es incapaz de presentar o elaborar una iniciativa de paz. En los asuntos europeos, en primer lugar, debe figurar la paz, pues esa organización surgió como un proyecto pacífico, comentó Fico al intervenir en una conferencia en esta capital.
En el evento para recordar los 20 años del ingreso eslovaco a la entidad comunitaria, el jefe de Gobierno criticó la actual posición de esa organización regional, ante su escasa actividad para promover conversaciones y buscar una rápida solución a la confrontación.
Eslovaquia respalda los planes para el ingreso de Ucrania a la UE. Kiev debe cumplir condiciones exigidas a los estados aspirantes, pero los estados de la región de los Balcanes pueden incorporarse a ese bloque mucho antes que la citada república exsoviética, comentó.
Fico consideró que los miembros de la entidad comunitaria más proclives a continuar el conflicto y el rearme de Ucrania son los que se pronuncian por un ingreso de ese país, pero muy lento, contrario a otros que se oponen a la guerra y respaldan una aceleración de ese proceso.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, llamó recientemente a los miembros de la UE a aumentar en un 50 por ciento sus gastos militares, en medio de las hostilidades en suelo ucraniano.
El 24 de febrero de 2022, el presidente Vladimir Putin ordenó una operación bélica para proteger a la región sublevada del Donbás, así como para desmilitarizar y desnazificar a Ucrania, que recibió desde entonces armamentos por 165 mil millones de dólares.
Medios de prensa comentan aquí que entre los mayores beneficiados de la continuación de la confrontación ucraniana están las empresas del complejo militar-industrial, incluidas las europeas.
De acuerdo con datos manejados por el diario argentino Página 12, en Europa resultaron más beneficiados con esa situación, la alemana Rheinmetall, la británica BAE Systems, la francesa Nexter y Nammo, propiedad de los gobiernos finlandés y noruego.
También obtuvieron grandes beneficios los proveedores de explosivos y propulsores, entre los que destacan Chemring, del Reino Unido, y Eurenco, de Francia.
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