El TSE comenzó a analizar este jueves los recursos contra la decisión que absolvió a Moro y después de la lectura del informe por el ponente del caso, ministro Floriano de Azevedo Marques, la audiencia fue interrumpida.
Se espera que se reanude el 21 de mayo, con la presentación de argumentos por las partes en el procedimiento.
La corte evalúa recursos presentados por el Partido Liberal (PL) y la Federación Brasil de la Esperanza (que reúne a los partidos de los Trabajadores (PT), Comunista de Brasil y Verde) contra la decisión del Tribunal Regional Electoral del sureño estado de Paraná (TRE-PR) que rechazó acusaciones de abuso de poder económico y mal uso de los medios de comunicación.
En la práctica, el fallo mantuvo el mandato de Moro como senador.
Tras las presentaciones de los abogados, el ponente y los demás ministros presentan sus votos. La decisión es por mayoría, es decir, con el voto de al menos cuatro ministros en un sentido.
Las acusaciones fueron hechas dentro del marco de acciones de investigación electoral.
Estos procesos pueden llevar a políticos a la inelegibilidad durante ocho años.
Al recurrir al TSE, el PL y la coalición de organizaciones políticas que encabeza el PT reforzaron acusaciones de irregularidades en los gastos de campaña y en las transferencias de recursos de los fondos Partidista y Electoral.
El equipo de defensa del exjuez negó actos ilícitos y pidió el mantenimiento del laudo del TRE-PR.
La Fiscalía Electoral defendió el rechazo de los recursos. Señaló que no hay «prueba clara y convincente» de las alegaciones de desviación de propósito presentadas por los partidos que apelaron.
Después de la decisión del TSE, es posible la presentación de recursos en la propia corte.
Moro adquirió reputación nacional e internacional al comandar, entre marzo de 2014 y noviembre de 2018, el juicio en primera instancia de los delitos identificados en la desarticulad operación judicial Lava Jato.
Sin pruebas, castigó al presidente Luiz Inácio Lula da Silva en 2017 a nueve años y seis meses de prisión por supuestos actos de corrupción.
Luego desistió al cargo de magistrado y fue nombrado ministro de Justicia por el exmandatario Jair Bolsonaro (2019-2022).
Más tarde dejó el puesto después que el exgobernante removiera sin consultarlo al entonces director de la Policía Federal, Maurício Valeixo, un hombre de su confianza.
ro/ocs