El Diario El Salvador refleja este viernes en su portada que el país cuenta a partir de ahora con sus dos primeras centrales híbridas, un nuevo paso hacia la modernización y ampliación de la matriz energética.
La víspera entraron en operación las plantas en los departamentos de La Libertad y Santa Ana, las cuales son las primeras bajo esta modalidad.
Explicó el diario que se trata de las plantas San Matías, en La Libertad; y San Luis, en Santa Ana, ambas operadas por Compañía Eléctrica Cucumacayán (CECSA), las cuales fueron intervenidas con la instalación de mil 600 paneles solares fotovoltaicos (entre ambas centrales) para incrementar su capacidad instalada y beneficiar a más de 14 mil familias.
Hemos modernizado nuestras centrales, las cuales encontramos casi en estado de abandono, dándoles un nuevo rostro, el rostro que se merece este nuevo El Salvador, expresó el presidente de CECSA, Juan Ceavega.
El directivo explicó que la Central Híbrida CECSA San Matías cuenta con una potencia instalada de 4.9 megavatios, 4.1 megavatios de hidroeléctrica y 785 kilovatios de energía fotovoltaica; mientras que la central San Luis reporta 0.7 megavatios provenientes de hidroeléctrica y 0.3 megavatios de fotovoltaica.
Precisó Ceavega que en cada central se instaló paneles solares de tecnología monocristalina y bifacial, los cuales permiten una mejor captación de la refracción y el reflejo de la luz del sol, tanto en la parte superior como inferior de los paneles, lo cual aumenta la generación en un 30 por ciento por encima de la tecnología fotovoltaica convencional.
Cifras indican que los proyectos, que cuentan con producción hidroeléctrica y fotovoltaica, permiten a la empresa evitar que vaya a la atmósfera un aproximado de seis mil 934 toneladas de CO2 por año, a la vez que aumenta la generación de forma constante, a mejor precio y con respeto al medio ambiente.
La operación híbrida de las centrales se suma al resto de iniciativas de generación renovables implementadas en el país, las cuales aportan el 80 por ciento de la matriz energética, frente al 20 por ciento que depende del búnker, señalan cifras de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL).
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