Indicó que esta situación contrasta con la escalada de precios de los países vecinos y del mundo en general, que repercuten en las mercaderías importadas, pero el fenómeno es refrenado gracias a las medidas de protección aplicadas por el Órgano Ejecutivo.
“En Bolivia, a pesar de ese escenario externo complicado, somos resilientes, nos adaptamos, no estamos en crisis como quieren posicionar (los) analistas económicos y políticos que intentan generar un ambiente de zozobra o de caos”, aseguró la autoridad en conferencia de prensa.
Destacó el titular la política de subvención a los alimentos y a los carburantes que permite mitigar y minimizar los aumentos inusitados de precios de algunos productos en el mercado internacional.
“Todo un esquema para ir protegiendo el bolsillo del boliviano -describió Montenegro-, están las subvenciones en los hidrocarburos, en los alimentos (…). La política de protección para las familias bolivianas, por la acción del Gobierno, está ahí presente para evitar golpes duros que vengan del sector externo”.
Recordó que a escala mundial las tasas de interés mantienen la tendencia de seguir aumentando y en América Latina son altas, a lo cual se suma que la inflación mundial permanece elevada, en un nivel de 5,3 puntos porcentuales.
“Hay influencias en los precios que vienen desde el exterior, hay incidencias de lo que está ocurriendo en la economía mundial y que afecta en la economía nacional, es decir, que hay precios en la economía que están siendo afectados por la dinámica de incremento de precios a nivel mundial”, remarcó.
Comentó respecto a esta situación que los precios de la gasolina aumentan en países de América del Sur, como en Uruguay, donde se mantiene a dos dólares por litro, mientras que en Bolivia continúa a 0,54 (3,74 bolivianos).
Informó, asimismo, que por problemas geopolíticos y de otra naturaleza a escala internacional, el Índice de Tarifas de Contenedores sigue en aumento.
Mencionó que, en diciembre de 2023, el valor aproximado de un contenedor de 40 pies era de mil 500 dólares, mientras que el 25 de enero de 2024 este indicador escaló hasta los tres mil 964 dólares; el 2 de mayo del año en curso decreció a dos mil 725, y el 23 de mayo último repuntó hasta los cuatro mil 72 dólares.
Al referirse a otros productos, Montenegro detalló que el arroz aumentó de precio en Argentina, Brasil, Uruguay y Chile, lo cual también se observó en el país andino amazónico, aunque en menor medida.
“(…) Bolivia tiene 10,6 bolivianos (1,51 dólares) por kilogramo cuando en Argentina está en 16,8 (2.40 dólares)”, indicó.
ro/jpm