La designación tiene lugar después que se aprobó recientemente la controvertida reforma constitucional que puso fin al sistema presidencialista y pasó a un sistema parlamentario.
La Constitución actual promulga ahora que es el presidente del partido político mayoritario o de la coalición mayoritaria en la Asamblea Nacional es designado primer ministro con plena autoridad para dirigir el gobierno.
Asimismo, el cargo de jefe de Estado quedará despojado de sus poderes en favor del primer ministro.
La polémica reforma constitucional, denunciada por la oposición, fue aprobada el pasado 19 de marzo en una votación que terminó con 87 votos a favor y ninguno en contra y elimina la posibilidad de que los togoleses voten directamente a su gobernante, que será elegido por la Asamblea Nacional.
Los partidos de oposición dicen que el nuevo puesto le permitirá evitar estos límites de términos y extender el control de su familia durante décadas sobre el poder y denunciaron lo que calificaron como irregularidades en la votación.
Observadores políticos recuerdan hoy que Gnassingbé llegó a tomar el control de Togo en 2005 cuando su padre, Gnassingbé Eyadéma, murió tras gobernar el país durante casi 40 años.
mem/fvt