El Ministerio bolivariano para Relaciones Exteriores hizo referencia en una declaración a la conclusión de la 27ª Reunión del Consejo de Relaciones Exteriores y Comunitarias, en particular, en lo relativo a la Controversia Guyana-Venezuela.
La nota lamentó la “posición parcializada” de Caricom y recordó a este organismo, “las continuas acciones belicistas propiciadas por Guyana”, al forjar alianzas con el Comando Sur y la Agencia Central de Inteligncia de Estados Unidos.
Denunció que estas no solo apuntan a la preparación de una agresión contra la nación sudamericana, sino que constituyen una flagrante violación a los acuerdos establecidos en la Declaración Conjunta de Argyle para el Diálogo y la Paz entre Guyana y Venezuela.
Este pacto suscrito el 14 de diciembre de 2023 en San Vicente y las Granadinas por los presidentes Nicolás Maduro su par guyanés, Irfaan Alí, acordó entre otras cosas, que ambos países no se amenazarían o usarían la fuerza el uno contra el otro.
El Gobierno venezolano afirmó que el historial de visitas a Guyana de altos funcionarios estadounidenses especializados en áreas militar, de seguridad e inteligencia, “es una tendencia que se ha profundizado en los últimos meses”.
Enfatizó que en dichas visitas se hicieron declaraciones injerencistas y formulado amenazas contra Caracas, lo cual constituye “una evidencia contundente de los peligros que desde la maquinaria de guerra estadounidense se ciernen sobre la región caribeña, con la anuencia del Ejecutivo de Guyana”.
El texto expresó que al ceder Georgetown su soberanía a la potencia norteamericana y a la voraz apetencia de la Exxon Mobil, “lamentablemente promueve la inestabilidad regional”.
Además, subrayó, de amenazar la Zona de Paz que representa América Latina y el Caribe tal como lo estableció la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños en La Habana, Cuba.
Venezuela instó a Guyana a no desviarse por “los derroteros de la confrontación” y cumplir con la única vía posible para la solución práctica y satisfactoria de la controversia sobre la Guayana Esequiba: que no es otra que un proceso de diálogo directo.
El cual, insistió, quedó establecido en el Acuerdo de Ginebra de 1966, “único instrumento vinculante para ambas partes”.
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