En el Palacio de Itamaraty, sede de la Cancillería en Brasilia, junto a su homólogo de Croacia, Zoran Milanović, el anfitrión dijo a la prensa que Brasil condenó de manera firme la invasión a Ucrania en 2022 y apoya un diálogo que sea aceptado por ambos países.
«Una desescalada (distensión) sería un paso necesario para que las partes (Rusia y Ucrania) puedan retomar el diálogo directo», expresó el fundador del Partido de los Trabajadores.
Aseguró que su país apoya la realización de una conferencia internacional que sea reconocida por Moscú y Kiev.
Para el exsindicalista, Brasil como el continente europeo están amenazados por el «extremismo político, por la manipulación de la información, por la violencia que ataca y silencia minorías» y citó las elecciones al Parlamento Europeo.
«El proceso de renovación política en la Unión Europea se aproxima. En pocos días, las 720 vacantes del Parlamento Europeo estarán en disputa. La vitalidad de la democracia es fundamental en este momento. Para vencer el totalitarismo, será necesario unir a todos los demócratas», comentó.
Durante su intervención, Lula también aludió al conflicto entre Israel y el ala militar del movimiento palestino Hamás.
Reiteró que Brasil seguirá trabajando por un alto el fuego permanente en ese enfrentamiento armado, el cual permita el ingreso de ayuda humanitaria en la región.
«La violación cotidiana del derecho humanitario es impactante y ha victimizado a miles de civiles e inocentes, sobre todo mujeres y niños», denunció.
Resulta fundamental, subrayó, que «la comunidad internacional trabaje para la solución de dos Estados (Israel y Palestina) viviendo uno al lado del otro en seguridad».
Milanović, quien cumple una breve visita al gigante sudamericano, también habló después del encuentro y agradeció la oportunidad de reunirse con Lula.
Señaló que el presidente brasileño «es una de las pocas voces en el mundo contemporáneo que califica para ser un referente internacional y un líder global y mundial».
Resaltó, asimismo, la importancia de la preservación ambiental y del sentido común en el abordaje de las «grandes cuestiones del mundo de hoy» como la paz y la cuestión humanitaria en el Estado de Palestina.
oda/ocs
