Esta semana, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia aseguró que las restricciones impiden aún más a las familias satisfacer las necesidades alimentarias de sus hijos.
De acuerdo con ese organismo, nueve de cada diez niños en Gaza sufren pobreza alimentaria grave y sobreviven con dos o menos grupos de alimentos al día, según datos recopilados entre diciembre y abril.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS), aseveró que hasta el 30 de mayo más de mil 200 pacientes no han podido salir de Gaza para recibir tratamiento en el extranjero.
Cerca de 14 mil pacientes necesitan evacuación médica a instalaciones fuera de la Franja de Gaza, aunque la OMS espera que el número aumente debido a la reducción de la capacidad de camas hospitalarias.
Los trabajadores sanitarios advierten que los pocos hospitales que todavía funcionan parcialmente en la zona de Deir al Balah, en el centro de Gaza, están cada vez más abrumados por la afluencia de víctimas de los ataques aéreos en curso.
A la par, el hospital de Al Aqsa presenta una situación especialmente grave con dos generadores del centro está fuera de servicio.
Esta semana, el organismo advirtió además por la expansión del conflicto a lo largo de la Línea Azul que separa a Israel del Líbano al instar a las partes a aprovechar los diferentes mecanismos para reducir la situación, en particular las reuniones trilaterales organizadas por la misión de mantenimiento de la paz.
“Estamos muy preocupados por las continuas y elevadas tensiones a lo largo de la Línea Azul”, dijo el miércoles el portavoz del secretario general (António Guterres), Stéphane Dujarric.
El propio Guterres renovó sus llamados para cesar el fuego a ambos lados de la línea al considerar que las hostilidades podrían derivar en un conflicto más amplio con consecuencias devastadoras para la región.
Ya se han perdido cientos de vidas, decenas de miles de personas han sido desplazadas y se han destruido hogares y medios de vida a ambos lados, insistió.
“Los incendios forestales provocados por explosiones están devastando aún más a las comunidades y el medio ambiente”, agregó en un comunicado.
El titular del organismo ratificó el apoyo a todos los esfuerzos diplomáticos y políticos para poner fin a la violencia.
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