Según la autoridad, entre los señalados está un hermano (Mathias) del volante de la Juventus, inhabilitado en febrero cuatro años por dopaje, lo que pudiera representar el fin como atleta del campeón del mundo de Rusia-2018 y uno de los favoritos del público de Les Bleus.
La escucha de conversaciones telefónicas, la vigilancia y los interrogatorios a los sospechosos permitieron a la Fiscalía reimpulsar un proceso bastante seguido por la prensa.
En marzo del 2022 Pogba fue secuestrado en un apartamento de Montévrain por encapuchados armados con un rifle de asalto, quienes le exigieron dinero y lo forzaron a firmar contratos comerciales.
Mathias estuvo detenido entre septiembre y diciembre de ese año, pero quedó en libertad.
Pogba, de 31 años, reconoció que los acontecimientos afectaron de manera notable su carrera futbolística, al igual que las lesiones.
“Yo estoy triste por Paul”, expresó en octubre pasado el seleccionador de Francia, Didier Deschamps, tras conocerse el control positivo a la testosterona que provocó la sanción.
A solo dos días del comienzo de la Eurocopa de fútbol en Alemania viene a la mente la situación del imponente y virtuoso jugador, capaz de adueñarse del mediocampo y de marcar goles en momentos clave, un indiscutible en los equipos de Deschamps y con edad para brillar todavía en el más universal de los deportes.
Mañana la cadena especializada L’Équipe presentará el documental “Pogba, relaciones tóxicas”, el cual ha generado expectativa en suelo galo.
ro/wmr