A bordo del trimarán Maxi Banque populaire XI, capitaneado por Armel Le Cléac’h, la flama llegó en manos del ídolo local, la tricampeona bajo los cinco aros en 200 y 400 metros planos de Barcelona-1992 y Atlanta-1996, Marie-José Perec, quien no disimuló la emoción del reencuentro.
En total fueron más de 120 los relevos en tierras guadalupeñas, con cambios en comunas como Pointe-à-Pitre, Le Moule, Basse-Terre, Les Saintes y Baie-Mahault.
El lunes, la llama estará en Martinica en el cierre de la aventura de ultramar de un recorrido de 12 mil kilómetros, desde su arribo a Marsella el 8 de mayo procedente de Grecia hasta su encendido en el pebetero en la jornada inaugural de los Juegos Olímpicos, el 26 de julio en las inmediaciones del patrimonial río Sena.
La flama encendida el 16 de abril en la localidad griega de Olimpia, precursora del magno evento deportivo bajo los cinco aros, regresará el martes al territorio metropolitano francés por el suroriental departamento de Alpes Marítimos.
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