De acuerdo con el centro de respuesta a emergencias, más de dos mil 200 bomberos, equipados con 63 excavadoras y 88 camiones cisterna, participaron en la extinción del fuego.
Inicialmente, las operaciones enfrentaron desafíos debido a las empinadas laderas de las montañas, las altas temperaturas y las condiciones climáticas ventosas.
Más tarde, las autoridades locales recurrieron a operaciones de siembra de nubes para inducir lluvias el sábado por la noche y de esa forma ayudar a apagar el incendio que inició el pasado miércoles.
Tras la contención del fuego, los bomberos comenzaron a despejar el lugar.
Se cree que el incendio de montaña en el distrito de Anze, conocido por su densa cobertura boscosa y su susceptibilidad a los incendios forestales, fue causado por un rayo, según reveló una investigación. oda/nvo