Biden, dio a conocer la iniciativa desde la Casa Blanca en el contexto de aniversario 12 del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), implementado el 15 de junio de 2012 por el entonces Gobierno de Barack Obama.
Se trata de uno de los mayores programas de ayuda federal para los migrantes desde que nació DACA y sale a la luz menos de cinco meses antes de las elecciones del 5 de noviembre.
Pero como dice el refrán ‘una de cal y otra de arena’, la acción ejecutiva llegó semanas después de una orden que restringió el asilo y que para no pocos activistas acerca las políticas de Biden sobre migración a las de su antecesor republicano, Donald Trump.
La medida actual proporcionará estatus legal y protección a unas 500 mil familias estadounidenses y a cerca de 50 mil hijos de inmigrantes menores de 21 años que no tengan ciudadanía y que uno de sus progenitores esté casado con un ciudadano de este país, señalaron funcionarios de la administración Biden, citados en medios locales.
En estos momentos la legislación federal establece que una persona indocumentada que entra en Estados Unidos y contrae nupcias con un nacional debe solicitar primero la libertad condicional antes de pedir la residencia legal, pero en ese proceso tendrían que abandonar el territorio de la Unión.
Con la decisión de este martes -que beneficiará a los arribantes antes del 17 de junio de 2014- esos cónyuges indocumentados podrán solicitar la residencia sin necesidad de salir del país y constituye un cambio sustancial porque mantendrá las familias unidas, un punto que destaca en la campaña electoral de Biden con el cual quiere distanciarse de Trump.
También el mandatario demócrata dijo que su Gobierno facilitará el proceso de concesión de visas de trabajo a profesionales extranjeros recién egresados de centros de enseñanza superior y que tengan una oferta de empleo altamente cualificado.
rgh/dfm
