El actual resulta el tercer juicio de este tipo acontecido en el país europeo, tras la puesta en marcha de una serie de operaciones policiales contra el movimiento e investigaciones por su presunta pertenencia a una organización criminal.

De acuerdo con la Fiscalía, esta agrupación y otras como Patriotas Unidos, valoraba un golpe de Estado y el establecimiento de un nuevo régimen basado en el imperio de 1871.

Según los servicios de Inteligencia alemanes en 2022 había unas 23 mil personas integradas en las organizaciones

Ciudadanos del Reich y Selbstverwalter, dos mil más que el año anterior.

En esta oportunidad, los acusados serán juzgados por supuestamente idear un ataque contra el Parlamento alemán y luego la caída del Gobierno del canciller, Olaf Scholz.

Sumado a ello, los presuntos criminales son imputados por pertenecer a una organización terrorista y preparar actos de alta traición, si bien los fiscales consideran que el grupo planeaba también secuestrar a Scholz para ganar seguidores,

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