De acuerdo con la Cartera de Estado, la medida responde al incremento irregular del flujo migratorio del país asiático.
En un comunicado emitido este martes, la Cancillería aquí señaló que han registrado a varios viajeros chinos que no han salido en el plazo permitido (90 días desde su ingreso al territorio nacional) o que estarían utilizando a Ecuador como punto de partida.
«En los últimos meses, se ha registrado un preocupante aumento en los flujos migratorios provenientes de China y, adicionalmente, no se registran salidas por vías regulares y en los tiempos establecidos por la ley de aproximadamente el 50 por ciento de esos ingresos», reveló el documento.
El Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana afirmó que trabaja para evitar que quienes visiten Ecuador sean víctimas de trata de personas o tráfico de migrantes.
Tras el anuncio del Gobierno ecuatoriano, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Lin Jian, declaró que su país «se opone firmemente a cualquier forma de inmigración ilegal».
En los últimos años -dijo- las fuerzas del orden chinas han tomado medidas contundentes para combatir los delitos que obstaculizan la gestión de las fronteras nacionales y han mantenido una postura estricta y de alta presión contra todo tipo de inmigrantes ilegales, añadió el vocero en rueda de prensa difundida por medios locales de prensa aquí.
Sin embargo, Jian no mencionó si esta decisión será recíproca e impedirá a los ciudadanos ecuatorianos en un futuro entrar al gigante asiático libres de visado.
Actualmente, los viajeros con pasaporte de Ecuador pueden ingresar por 30 días a China sin visado.
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