De acuerdo con ese informe del Istat, divulgado este martes en el sitio oficial de ese organismo gubernamental, en el pasado año también se registró una caída de 2,5 puntos porcentuales en el valor añadido a la misma, en relación con 2022, mientras el empleo en esa esfera se redujo un 2,4 por ciento.
En ese análisis se destaca en particular el descenso del 17,4 por ciento la producción, mientras que la producción frutícola se desplomó en 11,2 puntos porcentuales.
Se registraron además una reducción en la floricultura, del 3,9 por ciento, así como menores resultados en la producción de aceite de oliva, que bajó 3,0 puntos porcentuales, mientras las actividades de apoyo descendieron en un porcentaje de 1,6 puntos y el sector ganadero en un 0,9 por ciento.
Sin embargo, 2023 fue un año favorable para las plantas industriales, con un crecimiento de 10,2 puntos porcentuales, así como para la producción de cereales, que aumentó en un 6,6 por ciento, y además para las actividades secundarias, que ascendieron en un porcentaje de 7,2 puntos, precisaron los expertos del Istat.
En el pasado año continuó el aumento en los precios de venta de los productos agrícolas, que subieron un 3,9 por ciento, en particular de los ganaderos, que se incrementaron en 7,1 puntos porcentuales.
Por el contrario, los precios de los bienes y servicios utilizados descendieron un 2,5 por ciento, tras las fuertes subidas registradas en los dos últimos años, agrega la fuente.
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