Un reporte de la Guardia Costera, divulgado este viernes en el sitio digital del diario Corriere della Calabria, señala que hasta el momento los equipos que participan en esta operación recuperaron los cuerpos de 20 fallecidos en esa tragedia, ocurrida el lunes último, 120 millas náuticas al este de las costas del municipio Roccella Iónica.
Entre los niños cuya muerte pudo constatarse, se encuentran cuatro del sexo masculino e igual número del femenino, cuyas edades aún no fueron precisadas, a los que se suman hasta el momento seis hombres y seis mujeres, mientras se espera que en las próximas horas de incremente de manera significativa la cifra de víctimas fatales.
De acuerdo con las investigaciones realizadas, principalmente tras los interrogatorios a los sobrevivientes, se logró precisar que el velero siniestrado partió el 9 de junio desde las costas de Türkiye hacia Italia con unos 80 migrantes a bordo, y tras su hundimiento solo se logró salvar a 12, de los cuales uno murió debido a las heridas.
Este nuevo naufragio cercano a la sureña región de Calabria, ocurrió en un lugar muy próximo a donde hace poco más de un año, el 26 de febrero de 2023, se hundió una embarcación con unos 200 inmigrantes, de los cuales al menos 58 murieron.
En relación con el reciente hecho, el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, manifestó que se trata de “otra masacre más que nos duele mucho” y añadió que estos “son acontecimientos que nos entristecen y que nos motivan aún más a adoptar todas las medidas que intentamos apoyar junto con nuestros socios europeos”.
El propósito, según dijo, es “evitar que las vidas de personas queden entregadas a la crueldad de traficantes de personas”, para tratar de frenar el arribo a las costas de Italia de inmigrantes irregulares, que en este año ya suman 24 mil 290, hasta el 20 de junio, cifra inferior a los 58 mil 81 que arribaron en igual período de 2023.
El gobernador calabrés, Roberto Occhiuto, expresó tras conocer sobre esta nueva tragedia que “la noticia de la desaparición de los inmigrantes debido al naufragio del barco en el que viajaban, a unas cien millas de la costa de Calabria, es un puñetazo en el estómago”.
“Lo que estamos viviendo son horas de mucha angustia para toda la Región, horas que recuerdan el enorme drama que vivimos en Cutro hace poco más de un año”, señaló Occhiuto, quien lamentó que “la ruta turca, por donde parecen haber llegado estos inmigrantes, ha sido subestimada con demasiada frecuencia en los últimos años”.
“Se necesita una mayor atención por parte de Europa y de los gobiernos nacionales”, manifestó el gobernador, quien aseveró que “nuestros mares deben brillar con vida y esperanza, y no transformarse periódicamente en inmensos cementerios”.
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