Según la estatal Agencia Brasil, este viernes terminó el plazo para que los docentes hagan asambleas en sus centros de Educación Superior para analizar las propuestas del Gobierno y decidir sobre el retorno a clases.
La consulta en las 55 universidades fue determinada por el comando nacional de la huelga de profesores universitarios, ligado al Sindicato Nacional de Docentes de las Instituciones de Enseñanza Superior (Andes).
Sin embargó, la interrupción del paro no significa el retorno inmediato a las aulas y otras actividades académicas.
Cada universidad tiene autonomía administrativa para restablecer su calendario para finalización del primer semestre escolar de 2024 y el inicio del segundo.
Los profesores de la Universidad de Brasilia, por ejemplo, anunciaron que regresan a las clases el 26 de junio.
Durante este fin de semana, el comando nacional de la inacción calculará las respuestas de las secciones sindicales, secretarías regionales y de los comandos locales de huelga sobre la continuidad o terminación del paro.
También se analizará el desvío de retorno de las actividades y el inicio de la reposición, ya sea la próxima semana o solo a principios de julio.
El regreso a clases también depende del trabajo prestado por el personal técnico y administrativo que, entre otras actividades, es responsable de procesar los nuevos calendarios académicos y efectuar eventuales bloqueos de matrícula en los departamentos universitarios.
La Federación de Sindicatos de Trabajadores Técnico-administrativos en Instituciones de Enseñanza Superior Públicas de Brasil (Fasubra) analiza, asimismo, los resultados de la ronda de asambleas de las entidades de base ocurridas a lo largo de la semana.
El presidente Luiz Inácio Lula da Silva volvió a pedir el 20 de junio el fin de la huelga de los profesores universitarios y técnicos administrativos de las instituciones educativas federales.
«Comuniqué a los rectores que (con la huelga) no están dañando al Gobierno, no están perjudicando a Lula. Están perjudicando, de hecho, a los estudiantes, quienes se pierden buenos días de clase», declaró el fundador del Partido de los Trabajadores a una radio del estado de Ceará (nordeste).
Docentes y servidores técnicos presionan al Gobierno federal por reajuste salarial. Reclaman corrección de 3,69 por ciento este año, de nueve en enero de 2025 y otro 5,16 en 2026.
El Ministerio de Gestión e Innovación es el que aborda las negociaciones y niega estos índices.
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