Un informe divulgado este jueves por el Instituto Nacional de Estadísticas (Istat), publicado en el sitio digital de ese organismo gubernamental, apunta que esa evolución positiva del índice de confianza del consumidor refleja una mejora general en todos sus componentes.
En el clima económico y el clima futuro se registraron los aumentos más marcados, al pasar de pasando de 101,9 a 105,3 y de 95,7 a 98,7, respectivamente, mientras el clima personal subió de 94,4 a 95,8 y el actual pasó de 97,0 a 98,1.
En relación con las empresas, la confianza empeoró en todos los sectores investigados, excepto en el de la construcción y, en particular, en el sector manufacturero, el índice disminuyó de 88,2 a 86,8, mientras que en los servicios de mercado bajó de 97,8 a 97,1 y en el comercio minorista descendió de 102,8 a 102,2.
Sin embargo, en contra de esa tendencia negativa general, en la construcción se apreció en ese período una subida en el índice de confianza de 101,7 a 104,4.
En cuanto a los componentes, en la industria manufacturera las valoraciones sobre los pedidos empeoraron y se estima que se están acumulando los inventarios de productos terminados, a la vez que las expectativas sobre el nivel de producción sufrieron un ligero descenso.
En los servicios de mercado, se observó una tendencia negativa en las opiniones sobre los pedidos, mientras que tanto las opiniones sobre el desempeño de los negocios como las expectativas sobre sus pedidos mejoraron.
En lo que respecta al comercio minorista, se estima un empeoramiento tanto de las valoraciones como de las expectativas de ventas, a la vez que en las existencias en almacén se evidenció una baja en la acumulación, precisa el análisis
En resumen, de acuerdo con los expertos del Istat, en junio el clima de confianza empresarial mostró la tercera caída consecutiva, y se ubicó en el valor más bajo desde noviembre de 2023.
Esa caída del indicador general se debió principalmente al empeoramiento registrado en manufacturas y servicios.
Por su parte, el índice de confianza del consumidor aumentó por segundo mes consecutivo y alcanzó su valor más alto desde febrero de 2022.
Se observó una mejora generalizada en todas las variables que componen el índice, a excepción de las opiniones sobre el presupuesto familiar y las opiniones sobre la oportunidad de ahorrar en el momento actual, agrega la fuente.
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