La estructura del partido en el poder recomendó a su grupo parlamentario que, durante las próximas discusiones en el Legislativo de una nueva Ley de División político administrativa, incluyera abordar la creación de otra provincia a partir de la fragmentación en dos de la región capital.
El ministro de Administración Territorial (MAT), Dionísio da Fonseca, argumentó luego que Luanda pudiera quedar repartida en una zona litoral, que incluiría toda el área costera, con excepción de Cacuaco; y otra con los municipios del interior: Icolo y Bengo, Viana, el mencionado Cacuaco y una parte de Quissama.
Aclaró que se trata solo de una propuesta, y que la iniciativa debe ser discutida con la sociedad y en el Parlamento para tratar de lograr consenso.
Sin embargo, el tema encendió el debate sobre la necesidad o no de esa acción, y en particular generó opiniones contrarias del principal partido de oposición, la Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (Unita).
El grupo parlamentario de la Unita ya había votado en contra del proyecto de Ley de División política en febrero pasado, cuando el Legislativo hizo el primer debate del tema, por considerar que no se trata de un asunto prioritario ni decisivo para la eficiencia y eficacia de la gobernanza del país.
Este constituye uno de los cuestionamientos a la nueva propuesta del MPLA, pues según dijo a Correio da Kianda el secretario nacional de Comunicación y Marketing de Unita, Evaldo Evangelista, la mejor manera de responder a los problemas de los ciudadanos no es la división, sino la implementación de las autoridades locales.
El presidente del grupo parlamentario de esa fuerza política, Liberty Chiyaka, fue más lejos y en una conferencia de prensa el pasado 27 de junio, aseguró que la iniciativa es “una maniobra para distraer a los angoleños”.
Esta no es una cuestión importante en este momento y no tiene impacto en la evolución política nacional ni en la gestión económica y social del país, afirmó Chiyaka, quien opinó que el MPLA atraviesa una crisis de liderazgo y no tiene la capacidad de enfrentar la grave crisis económica y social actual.
En tanto, el portavoz de Unita, Marcial Dachala, consideró que se trata de una estrategia electoral, dados los resultados de los comicios del 2022, cuando el MPLA perdió terreno en la provincia capital.
Quieren dividir Luanda previendo el peligro de las elecciones en el año 2027, apuntó y añadió que este territorio precisa soluciones de carácter social y económico.
Si bien el anuncio de la propuesta no detalló las razones para esta, Luanda tiene la mayor concentración de población del país, con alrededor de 10 millones de habitantes, y dificultades relacionadas con las infraestructuras viales, la transportación, los servicios de agua y saneamiento, entre otros.
Según el especialista en política y Administración Pública, Denílson Duro, esta es una de las provincias más pequeñas del país en términos de extensión territorial, pero el gran problema es la densidad de población, la falta de empleo y la inexistencia de estímulos para que los más jóvenes regresen a sus zonas de origen.
Estos aspectos, junto a los asuntos antes mencionados, complejizan la gestión de la capital, reconoció el experto, pero comentó a Correio da Kianda que no cree que la nueva división traiga mejoras, además de alertar sobre la concentración de recursos en este territorio, en detrimento de otras provincias.
Más allá de que el anuncio haya sido empleado para ataques políticos, ciudadanos comunes como Sambita, una de las tantas vendedoras de alimentos de las calles de Luanda, no entienden la necesidad o no de esta propuesta o sus probables implicaciones en materia presupuestaria y otros detalles.
Para ella la urgencia es el incremento de los precios de productos básicos como el arroz o el aceite, o el aumento del pasaje del transporte público, para poder ir a trabajar cada mañana y ganar el sustento de su familia.
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