El texto refiere que del 27 al 29 de este mes, Estados Unidos, Japón y la República de Corea efectuaron en las aguas marítimas cercanas a la RPDC el primer ejercicio militar multiespacial de 3 partes, Freedom Edge.
En este sentido, condenan las repetidas, imprudentes y provocativas acciones de demostración militar contra la RPDC y otros Estados independientes de la región, les advertimos una vez más en serio sobre las consecuencias fatales que emanarán finalmente de ellas.
De acuerdo con el documento, la sociedad internacional evalúa unánimemente que ese entrenamiento implica el intento estratégico de Washington de agravar la tensión militar de la región, presionar al Lejano Oriente de Rusia y asediar a China.
Sumado a ello, la realización regular de los ejercicios trilaterales y el objetivo de la Casa Blanca de tomar la hegemonía mundial sobrepasó ya el límite de peligro y produce un cambio muy negativo en el ambiente de seguridad del mundo y su estructura de dinámica geopolítica.
La ejecución de estas maniobras militares en varios teatros operacionales como mar y cielo «resulta muy grave porque es un producto de las pretensiones de dar el carácter organizado, sistemático y material al bloque militar».
Según la RPDC, esto hace recordar el principio de defensa colectiva de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de que si es atacado un país miembro, acontecerá la movilización del potencial defensivo, pues resultará como un ataque contra todos.
Similar a las acciones de la Alianza Atlántica, «cada año con ejercicios militares conjuntos en la tierra, mar, cielo, el espacio cibernético y otras esferas, las tres partes decidieron realizar regularmente Freedom Edge, lo cual insinúa que sus relaciones adquirieron el aspecto de la OTAN en versión asiática».
jha/dgh
