Un documento sobre los estatutos del contingente les otorga el derecho a despachar en la aduana sin prohibición o restricción alguna de los equipos, suministros, provisiones, materiales y demás mercancías que necesiten.
De conformidad con el artículo ocho del Acuerdo, los principales jefes militares, directores adjuntos y todos los demás miembros del personal gozarán de privilegios e inmunidades.
«Exime al personal del MMAS de los impuestos sobre el salario y los emolumentos recibidos por su servicio en las fuerzas, así como sobre cualquier ingreso recibido fuera de Haití», subraya el texto oficial.
También están exentos de cualquier otro impuesto directo, excepto los impuestos municipales sobre los servicios utilizados.
Los militares extranjeros no pasarán por las formalidades migratorias previstas por las leyes haitianas, incluidos los pasaportes y los visados de entrada, puntualiza el documento citado por el diario Le National.
El sistema de justicia haitiano no puede enjuiciar al personal del MMAS bajo ninguna circunstancia sin informar a la persona a cargo con pruebas de apoyo.
Los locales asignados a la misión siguen siendo inviolables y no deben ser objeto de ninguna inspección por parte del gobierno haitiano.
El rotativo digital enfatizó que para algunos actores, estos privilegios despojan al gobierno de muchos de los suyos, y fortalecen la capacidad de los soldados foráneos para operar como deseen en territorio haitiano.
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