Como consecuencia, el jugador de 24 años y 1,90 metros metros de estatura es libre de negociar su futuro con cualquier otro equipo.
Marcos, quien tiene pasaporte italiano, recaló en las categorías inferiores del Barça en el verano de 2019 y disputó 54 partidos en el filial, con una media de nueve puntos, 3,1 rebotes y 3,1 asistencias en la LEB Plata, la tercera categoría del baloncesto español.
En realidad, no jugó nunca en el sexteto catalán de élite, pues estuvo las últimas tres campañas en calidad de cedido, dos en el Força Lleida (2021-2023), de la Segunda División, y la más reciente en el Bàsquet Girona.
Con este último disputó 23 encuentros y promedió 9,7 puntos, 3,5 asistencias y 3,1 rebotes en el estreno del jugador en la Liga Endesa, la principal de España.
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