El Ejército de Guyana cargó un avión con generadores eléctricos, comida, agua y otros artículos que serán distribuidos en las islas granadinas de Carriacou y Petite Martinique, mientras el presidente Irfaan Ali anunció que está listo para aportar materiales de construcción más adelante.
Desde Trinidad y Tobago la compañía Island Hoppers dijo que prepara el traslado de un barco con bienes de primera necesidad a Carriacou e invitó a la población a sumarse con la entrega de insumos, mientras la agrupación Is There Not A Cause anunció la distribución de alimentos, productos de aseo, para bebés y de limpieza.
La empresa Habitat for Humanity informó que ayudará con la reconstrucción de viviendas y otras tres firmas trinitenses recolectan suministros, medicamentos y materiales de emergencia para las familias afectadas durante el paso del ciclón.
En la ciudad estadounidense de Nueva York la empresa Plenty’s Paradise recoge donativos para los residentes de Carriacou y Petite Martinique, y lo mismo hace en Londres la tienda Mo Better Cutz.
Al mismo tiempo, están abiertos varios portales digitales que recaudan fondos para transferirlos a las naciones asoladas ayer por Beryl.
Aparte de esos movimientos de solidaridad, la Comunidad del Caribe también gestiona con sus agencias de manejo de desastres la entrega de asistencia urgente para los mencionados territorios.
Tanto Granada como San Vicente y las Granadinas este martes comenzarán con la evaluación de los daños para calcular su magnitud exacta y además determinar las cifras de damnificados.
El primer país seguirá bajo estado de emergencia hasta el 7 de julio próximo y reabrirá su aeropuerto solo para recibir los vuelos con ayuda humanitaria.
San Vicente y las Granadinas hará uso de su fondo de contingencia y pedirá préstamos para emprender la reconstrucción de las viviendas en todo el país y en la isla de Union Island, donde 90 por ciento de los edificios están dañados.
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