El titular salvadoreño brindó este miércoles una amplia actualización y precisó que 27 pacientes se encuentran hospitalizados, cinco de ellos en estado grave, mientras avanza una intensa campaña de fumigación y de aplicación de otras medidas para eliminar el mosquito transmisor de la enfermedad.
En América se reportan más de nueve millones de casos de dengue, de los cuales 139 fueron detectados en El Salvador, incluyendo tres letalidades, luego de no reportar fallecidos por esta causa durante cinco años.
Las acciones que realizamos nos permiten sumar cinco años sin muertes por esta enfermedad, pero este año es atípico para las Américas. No solo es el hecho de las letalidades, sino el incremento de casos desde que se tomaron las diferentes medidas de protección, dijo el ministro en una entrevista en el espacio Frente a Frente del canal 4 de la televisión local.
Destacó la facilidad con que se replica la enfermedad en diversos países y llamó a sus compatriotas a poner “nuestra parte en casa, debemos lavar, tapar o destruir los criaderos de zancudos. El abate está a disposición en las unidades de salud, la población puede llegar a las unidades y pedirlo», detalló.
En cuanto a los decesos por el padecimiento destacó el reducido número en el país, solo tres en comparación con otras naciones como México, que reporta 26 decesos, seguido de Honduras (21), Guatemala (15) y Panamá (12).
Durante su intervención televisiva, Alabi destacó la articulación de instituciones como Protección Civil, el Sistema Nacional Integrado de Salud y el Ministerio de Educación, entre otras, para lograr el desarrollo de acciones contra el dengue.
Pese al despliegue gubernamental para enfrentar la epidemia, el Colegio Médico local cuestionó la tardanza del Ministerio de Salud en emitir la alerta por dengue, algo que consideran debió hacerse al menos hace 12 semanas.
El doctor Iván Solano Leiva, presidente de la entidad, manifestó que ya no estamos en una alerta por dengue, sino ante una emergencia de salud pública.
El directivo coincidió con las acciones inmediatas que se deben tomar, entre ellas la fumigación, alertar a las comunidades y las personas, revisar que no haya criaderos de zancudos en sus casas, en las empresas o en cualquier lugar o zonas cercanas a sus localidades.
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