Luego de casi cinco años esquivando los embates de un mal que afecta a muchos países de Latinoamérica, el llamado Pulgarcito de América fue golpeado por la enfermedad y ahora se esfuerza por contener los aumentos y brotes del dengue, padecimiento que causa la muerte de muchas personas debido a las complicaciones de salud que lo acompañan.
Muy lejos de lo que enfrenta Brasil, por ejemplo, que registró hasta el martes su peor semestre de la historia en casos y muertes provocadas por la enfermedad, con seis millones 215 mil 196 casos probables y cuatro mil 269 muertes confirmadas, El Salvador comenzó la defensa.
En esa dirección las autoridades incrementaron las acciones de fumigación para eliminar el mosquito y sus criaderos, y según informes hasta el 1 de julio se reportaban más de 487 mil casas fumigadas y 587 mil verificadas en solo una semana.
Al respecto autoridades señalan que ante la alerta epidemiológica decretada en la madrugada del martes, estas acciones serán incrementadas para evitar la proliferación del mosquito transmisor en esta época invernal prodiga en lluvias, entre ellas las jornadas de fumigación, y de esta manera prevenir el dengue, zika y chikungunya.
Asimismo personal del Ministerio de Salud (Minsal) también se encuentra realizando inspecciones en los hogares para entregar abate, que puede ser usado en pilas, barriles u objetos que almacenan agua.
La alarma crece y los salvadoreños miran con preocupación el masivo aumento de casos de dengue en 2024 en países como México, Ecuador, Argentina, Uruguay, Brasil y Honduras, entre otros, donde hay una crisis epidemiológica por contagios.
Más cerca, en Guatemala las autoridades del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social reportan más de 35 mil casos en ese país donde al menos 12 personas ya fallecieron.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó que la región de América Latina y el Caribe reporta en 2024 más de 9,3 millones de casos de dengue, lo que representa el doble de casos registrados en todo 2023.
Ante esta amenaza, incrementada por las intensas lluvias de las últimas semanas y las que se esperan por las contrariedades climáticas de los próximos días, el país se apresta a vencer el desafío y evitar la prolongación de la epidemia, reiteran autoridades.
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