Holness estuvo recientemente en el Centro de Comando de la Oficina de Preparación para Desastres y Gestión de Emergencias, donde recibió información sobre el impacto actual del huracán y revisó el sistema de respuesta de Jamaica.
Detalló que al actualizar a los medios de comunicación, señaló que había casi 500 jamaicanos en refugios.
Estamos poniendo énfasis en garantizar que estén cómodos y bien cuidados, manifestó el Primer Ministro a la prensa.
Ya se sienten las lluvias y los vientos en varias zonas del país, con derribo de árboles, a medida que el sistema, que sigue siendo de categoría 4, pasa por la costa sur de la isla.
Ayer Holness aseguró que las fuerzas de seguridad estarán plenamente movilizadas para mantener el orden público y ayudar en casos de desastre tan pronto como el huracán Beryl pase por Jamaica.
Durante una transmisión nacional el martes, afirmó que la Fuerza de Policía y de Defensa de Jamaica desarrollan planes estratégicos para contrarrestar cualquier amenaza potencial de saqueo u otros delitos oportunistas durante este período.
Holness enfatizó en que el huracán resalta aún más la necesidad urgente de una acción climática global y un apoyo específico para mejorar la resiliencia contra los crecientes peligros del cambio climático.
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