Raúl García Baltasar, director general de la instalación turística situada en la península Ancón, en la centro sureña ciudad de Trinidad, habla de los elementos arquitectónicos que adornan la instalación, en cuyos exteriores sobresale el color amarillo.
Sin dejar de mencionar la labor que realiza el hotel en aras de la preservación del medio ambiente señala hacia las bicicletas a disposición de los clientes para practicar el senderismo.
Tampoco deja pasar la ocasión para resaltar la fuente a la entrada, donde habitan una docena de jicoteas que atraen la atención de grandes y chicos, como un modo de cultivar el interés por el cuidado de la naturaleza.
Hasta la emblemática Plaza Mayor tiene una réplica aquí, con sus galgos negros, la escultura al centro, bancas, verjas que la rodean, así como las calles coloniales de la otrora villa de la Santísima Trinidad, en tanto el Restaurante 1514 alude a la fundación de esta.
La Plaza Mayor original está ubicada en el centro histórico urbano de Trinidad, el que junto al Valle de los Ingenios, incluyendo a la emblemática torre Manaca Iznaga, fue declarado en 1988 por la Unesco Patrimonio Cultural de la Humanidad.
García Baltasar explicó a Prensa Latina que comenzó en enero último como director general en la instalación turística y catalogó a los cubanos como “personas amables y hospitalarias” y a seguidas comentó “Yo no puedo fallarle a Cuba, porque Cuba se lo merece”.
“El cubano es inteligente, creativo, tiene inspiración y ofrece su solidaridad. Sentir el 26 es sentirnos Cuba”, enfatizó al referirse a la celebración del acto central por el 26 de Julio, Día de la Rebeldía Nacional, en la provincia de Sancti Spíritus.
Aseguró que está en el país caribeño desde hace unos 15 años y de ellos trabajó cerca de dos en el icónico Hotel Inglaterra, en La Habana, también como director general.
Habla con orgullo y cariño de la localidad de Guadalupe, en Extremadura, España, región en la cual dice predomina la agricultura y la ganadería y está ubicada en la frontera con Portugal.
Esta es una oportunidad para visitar el huerto basado en la agricultura ecológica donde calabazas y ajíes se entrecruzan con el orégano o la menta asiática, entre otras plantas usadas en la cocción de alimentos o en la preparación de cocteles como la hierbabuena.
La instalación turística cuenta con 241 habitaciones, precisa el directivo, quien avala lo relativo a la eficiencia económica del hotel, el cual fue inaugurado en 2001 como Brisas Trinidad del Mar.
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