«La Covid vino en un momento en que la gente tenía un gobernante irresponsable, que jugó con la salud del pueblo brasileño. ¿Y quién evitó una desgracia mayor en este país? Fue precisamente la existencia del SAMU (Servicio de Atención de Móvil de Urgencia)», señaló Lula en un evento de entrega de ambulancias en el municipio Salto, estado de Sao Paulo.
Ponderó a las enfermeras, enfermeros, a «nuestros empleados… No fueron pocas las personas que perdieron la vida intentando salvar la vida de personas que ni conocían», refirió.
Sin citarlo directamente, el gobernante también señaló la responsabilidad de Bolsonaro por al menos la mitad de los 700 mil muertos por la Covid-19 en Brasil.
«Es verdad que hemos perdido más de 700 mil personas. Es verdad que hay gente que tiene responsabilidad por lo menos por la mitad (de los fallecidos por la enfermedad)», apuntó el fundador del Partido de los Trabajadores.
Reconoció que nunca vio en la historia de la sociedad brasileña a nadie recetar medicamentos sin el consentimiento de los médicos, en clara alusión a los intentos de Bolsonaro de convencer que la cloroquina servía para tratar el virus.
Insistió en que nunca vio a «nadie recetar medicina para la malaria para cuidar de Covid. Pero en este país se inventó todo y se contó todo lo que es mentira. Gracias a Dios prevaleció la verdad y el SUS (estatal Sistema Único de Salud) está aquí, orgulloso de servir al pueblo brasileño», apuntó.
Recordó los ataques hechos contra el SUS antes de la pandemia, que evidenció la importancia del sistema universal de salud.
Las críticas de Lula afloraron el mismo día en que la Policía Federal (PF) decidió acusar a Bolsonaro por la venta ilegal de joyas y falsificación de tarjetas de vacunación.
Tales inculpaciones debe ser remitidas a la Procuraduría General de la República en los próximos días, según revela el portal Metrópoles.
Además del exgobernante, otros de sus adeptos y auxiliares fueron acusados por la PF y entre ellos figuran el teniente coronel Mauro Cid, exayudante de órdenes del político ultraderechista, y los abogados Fabio Wajngarten y Frederico Wasseff.
Por el momento, la PF no va a solicitar la prisión preventiva ni de Bolsonaro, ni de los aliados, según el sitio.
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