Una primera mitad pareja con dinamismo pero sin ocasiones de gol claras para romper el 0-0 del marcador del estadio Allegiant de Paradise, estado de Nevada, caracterizó el inicio del partido entre la canarinha y la garra charrúa
En el tiempo complementario las circunstancias se mantuvieron muy similares y constantes faltas frenaron la fluidez del choque dominado en posesión por los brasileños sin transformar la tenencia de la pelota en oportunidades significativas de marcar en la portería custodiada por Sergio Rochet.
Al minuto 74 la expulsión de Nahitan Nández por una fuerte entrada dejó a los uruguayos con un hombre de menos en la recta final del partido, ventaja poco aprovechada por la verdeamarela, frenada por la dura resistencia de sus rivales.
Todo quedó listo para la tanda de penales, la tercera de cuartos de final, con la tensión latente entre jugadores, cuerpo técnico y aficionados asistentes al coloso de Glendale.
En la tanda de penales la garra charrúa no falló ninguno de los tres primeros penales mientras Éder Militao y Douglas desperdiciaron sus disparos para dejar todo listo al cobro de Manuel Ugarte quien acertó su lanzamiento para decretar el 4-2 final favorable a los uruguayos.
Uruguay demostró sus fortalezas tanto en lo físico como en lo mental y con esas herramientas dejaron fuera a uno de los elencos favoritos del torneo y rivalizará con Colombia en una de las semifinales de la edición 48 de la Copa América de fútbol.
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