Según el diplomático, Rusia sabe que Kiev y sus aliados occidentales planean celebrar un evento similar a la cumbre sobre Ucrania que tuvo lugar en Suiza a mediados de junio y que, en su opinión, fue un fracaso.
El viceministro señaló que aún se desconoce el lugar del evento, aunque agregó que lo importante no es la geografía, sino «el contenido, con el cual queda todo muy claro».
En este sentido, Galuzin precisó que los países occidentales buscan promover la fórmula de paz del presidente ucraniano, Vladimir Zelenski, mostrando «una ignorancia deliberada de otras iniciativas para resolver la crisis ucraniana».
Suiza celebró una conferencia sobre Ucrania los días 15 y 16 de junio, cerca de la ciudad de Lucerna, a la cual no fue invitado el presidente ruso, Vladimir Putin, y tampoco asistieron los mandatarios de China, Brasil y la India, aunque estos últimos sí enviaron delegaciones oficiales.
La declaración final de la cumbre consta de tres párrafos y llama a devolver bajo el control de Kiev la planta nuclear de Zaporozhie, garantizar la navegación libre en los mares Negro y de Azov y liberar a todos los prisioneros de guerra.
Según los organizadores, de una centena de naciones presentes, unas 80 apoyaron el documento final, mientras que varios estados, entre ellos México, Brasil, Sudáfrica, Arabia Saudita, Armenia, Emiratos Árabes Unidos, la India, Libia, así como el Vaticano no lo rubricaron.
Como alternativa, Putin planteó el 14 de junio iniciar las negociaciones de paz ese mismo día, si Ucrania retira sus tropas de los nuevos territorios rusos –las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, así como de las regiones de Jersón y Zaporozhie.
El líder ruso exigió además a Kiev que rechace oficialmente los planes de adherirse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y mantener el estatus neutral, no alineado y no nuclear, mientras todas las sanciones contra Rusia deben ser levantadas.
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