Esta decisión se tomó porque Ucrania llegó a la conclusión de que el uso de dos sistemas de combate aéreo al mismo tiempo, el F-16 y el Gripen, era demasiado, destacó el ministro sueco.
Según él, la decisión tomada no significa que en el futuro Suecia no esté lista para suministrar a Ucrania sus cazas.
El 31 de mayo, Suecia y Ucrania firmaron un acuerdo de seguridad bilateral que implica la transferencia de aviones ASC 890 a Kiev para el sistema de defensa aérea ucraniano.
De acuerdo con el documento, el gobierno sueco también tenía la intención de considerar la posibilidad de suministrar cazas JAS 39 Gripen a las fuerzas armadas ucranianas.
Por su parte, el presidente ruso, Vladimir Putin, en varias ocasiones ha subrayado que el suministro de nuevas armas a Ucrania, incluidos los F-16, no cambiará la situación en el frente, pero conducirá a una prolongación de la situación.
También señaló que esas naves, si aparecen en las Fuerzas Armadas de Ucrania, arderán de la misma manera que otros equipos militares anunciados por Occidente.
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